El jitomate o tomate, originario de los bajos Andes, y cultivado por los aztecas en México, es una de aportaciones al mundo.
La palabra azteca “tomatl” significaba simplemente “fruta hinchada” y los conquistadores españoles lo llamaron “tomate”.
En 1521 los europeos tuvieron el primer contacto con el jitomate o tomate domesticado en Mesoamérica donde era un fruto en la cultura y dieta náhuatl en el siglo XVI.
Posteriormente los conquistadores españoles lo introdujeron a Europa tras la conquista por Hernán Cortés de la ciudad de Tenochtitlan.
Cortés llevó de América una variedad de tomates más pequeños y amarillos, los desarrollados por los Aztecas . Cuando los recibieron los italianos, los bautizaron como manzanas doradas o pomodoro.
Aunque el uso de tomates se extendió por toda Europa y se abrió paso a Italia antes del siglo XVI, originalmente no era una fruta y por creencias, fueron cultivados como una planta de jardín ornamental.
El registro del 2019, data que el volumen de producción en México alcanzó las 3,4 millones de toneladas métricas, lo que representó una caída de alrededor del 9% en comparación con lo reportado el año anterior.

Los tomates se abrieron paso a Norte América con los colonizadores, pero no ganaron popularidad sino hasta mediados del siglo XIX. Actualmente, debido al desarrollo de nuevas variedades los tomates se han convertido en una de las hortalizas más vendidas en el mundo.
- Anualmente se exportan a Estados Unidos 2 mil 200 millones de dólares de dicha hortaliza
- El mayor productor de tomate en México es el estado de Sinaloa.
- En México es la base de la alimentación por utilizarse en casi todos los platillos: en chalupas, tacos, ensaladas, salsas , chilaquiles, mole de olla entre mil variedades más que colocan a la cocina mexicana en una de las ms deliciosas del mundo
