Regresa a México lo que nunca debió haberse ido, y es el “sufragio efectivo, no reelección“; y la práctica de nepotismo puro (o puro nepotismo), que tampoco debería existir dentro de un ejercicio democrático como el que se ejerce oficialmente en nuestro país .
Y es que, si bien es cierto, hay un problema muy grande (y muy grave) en México y en el mundo: La dualidad producto de la falta de preparación en política y en administración para quienes ejercen un puesto público y es que…
- No hay perfiles preparados para gobernar
- y cuando se elige a alguno, el tiempo de mandato es corto para que una administración ejerza sus planes o proyectos.
¿Por qué?, precisamente porque el primer año de “gobierno” es de aprendizaje muchos políticos o personajes que llegan a puestos públicos no tienen ni idea de cómo comunicar; o sea, no saben ni cómo hablar y mucho menos hacerlo en público.
En el segundo proyectan, y en el tercero ya se van; y generalmente viviendo procesos de campaña y elecciones nuevamente. Y así se repite la historia en el caso de alcaldes y legisladores, principalmente.
Traducción: Hace falta preparación para quienes se postulen a elecciones.
La revisión debe ser profunda….